Musulmanas II
Sarah la migratoria
Sarah emigró por Dios con su esposo y su sobrino Lot - la paz sea con ellos - a Palestina, pero cuando se intensificó la sequía allí, emigró con su marido una vez más a Egipto. Su historia se extendió rápidamente hasta llegar a Faraón que había ordenado a sus guardaespaldas de comunicarle la llegada de cualquier mujer hermosa a Egipto.
Un día, los soldados comunicaron al Faraón que una hermosa mujer entró a Egipto, y cuando Abraham se informó de ello, dijo a Sarah: “si él sabe que eres mi esposa te va a hacer daño, así que si te pregunta dile que eres mi hermana, ya que somos hermanos en el Islam y somos los únicos musulmanes en esa tierra”.
El Faraón pidió a sus soldados que trajeran a esa mujer, y cuando llegó al palacio del Faraón pidió a Dios que le protegiera del mal, realizó la ablución, rezó, e hizo duaa diciendo: “Oh Dios, sabes que creo en ti y en tu mensajero y no he tenido relaciones ilícitas, protégeme de este infiel". Dios respondió el duaa de su creyente servidora y detuvo la mano del Faraón para que no pueda hacerle daño.
El Faraón pidió a Sarah que le pidiera a Dios que le devolviera la mano como era y que él no le iba a hacer daño, Sarah lo pidió a Dios y Dios le respondió, pero Faraón quería tocarla otra vez, no cumplió con el pacto hasta una tercera vez. Finalmente pidió al mismo salvaguardia que la trajo que la devolviera y le dio una sirvienta llamada Hagar –que la paz sea con ella- y les dejó salir sanos y salvos de su tierra.
Abraham volvió junto a su esposa a Palestina, Lot –que la paz sea con él- siguió su camino hacia el pueblo de Sodoma y Gomorra (actual Jordania) llamándoles a adorar a Dios y advirtiéndoles de inmoralidad y desobediencia.
Pasaron años sin que Sarah pudiera tener hijos para que alegraran a su marido y que le apoyaran en su vejez, entonces pensó en otorgar Hagar a Abraham para que se casara con ella pero al mismo tiempo temió que su marido se alejara de ella por su nueva esposa, pero con el paso de los días se deshizo de estos pensamientos, porque se dio cuenta de que Abraham - que
Abraham - la paz sea con él - se casó con Hagar, y Sarah se puso celosa después de que aparecieron las síntomas del embarazo de Hagar. Tras dar a luz a Ismael - la paz sea con él - Sarah pidió a Abraham que se llevara a Hagar y su hijo a un lugar lejano de ella. Abraham llevó a Hagar y a su bebé al valle de
Pero las pruebas de Dios no acaban, por lo que aparecerían otras pruebas. Un día vino un grupo de personas para visitar a Abraham –que la paz sea con él- entonces sacrificó a un becerro pero le sorprendió que no comieran, ya que eran ángeles en forma de comerciantes que venían a la casa de Abraham –que la paz sea con él- le saludaron y Abraham les respondió.
“Y fueron Nuestros mensajeros a Ibrahim a llevarle las buenas noticias y dijeron: Paz, contestó: Paz; y no tardó en venir con un becerro asado.
Pero al ver que no tendían sus manos hacia él, le pareció extraño y sintió miedo de ellos. Dijeron: No temas, hemos sido enviados a la gente de Lot” [houd: 69-70].
El Todopoderoso dice: “Y cuando el miedo se fue de Ibrahim y le hubo llegado la buena noticia, Nos habló a favor de la gente de Lot.
Es cierto que era indulgente, movido a la compasión y siempre se volvía (a Allah)”.
[Hud : 74-75
Los ángeles avisaron a Abraham - la paz sea con él - que van a los sodomitas, por haber desobedecido el profeta de Dios Lot, y no lo siguieron.
Antes de que los ángeles salieran, le dijeron a Abraham - la paz sea con él –que su esposa Sarah dará a luz a un hijo llamado Ishaaq, y que este niño crezca y se casará y tendrá un hijo llamado Ya´qub.
Cuando Sarah se enteró de la noticia, se quedó asombrada y se puso muy alegre como todas las mujeres cuando están embarazadas. Dijo: “¡Ay de mí! ¿Cómo voy a parir si soy vieja y éste mi marido es un anciano? ¡Realmente esto es algo asombroso! Dijeron: ¿Te asombras del mandato de Allah? ¡Que la misericordia de Allah y Su bendición sean con vosotros, gente de la casa!
Cierto que Él es Digno de alabanza, Glorioso" [Hud: 72-73]
Sarah quedó embarazada y dio a luz a Ishaaq –que la paz sea con él-. Dios bendijo a Ishaaq por ella y su marido; los descendientes de Ishaaq son los Banú Israel.
Esta es la esposa del profeta Abraham –que la paz sea con él-, fue la primera en seguir al padre de los profetas, Abraham -que la paz sea con él- cuando fue enviado a su pueblo para guiarlos al camino recto, Lot su sobrino fue el siguiente en seguirlo, fueron esos tres los únicos creyentes en esos tiempos. Sarah murió a los 127 años.
Por: Ali Ben Nayef Al Shahud
Traducido por: Sabah Chentouf Lkbir